Ella cuenta que el primero empezó a desnudarle y le hizo el amor de una manera, tan delicadamente sensual, que en un momento, hasta se olvidó, que estaba siendo objeto de una violación, y echó de menos una copa de champán, y buena música, para sentirse aún mejor.
Luego el segundo, el
tercero, el cuarto, la tomaron con loco desenfreno, ya que tenían un buen rato de estar observando impacientes, y querían participar en la escena donde se notaba que ella, de cierta forma respondía
a la entrega …En un momento ella dejó que el placer la embargara por completo y se entregó con ardor a sus
raptores…
El quinto hombre, estuvo
sumamente agresivo y violento, lo primero que hizo fue querer sodomizarla,
violentamente la tomo a la fuerza, antes partió una botella de cerveza y con los picos de esta, trato de cortar sus nalgas...Ella, da las gracias a los primeros
hombres que la poseyeron, que ya se habían quedado prendados de sus encantos,
intercedieron por ella y lograron calmar al agresor…Y tímidamente empezó a
rezar la oración de las siete palabras, mientras el hombre arremetía con furia un descomunal pene dentro de ella mientras la agarraba fuertemente por los cabellos y enfurecido le gritaba que dejara de rezar, ella le
contestó entrecortadamente: “ Tú tira, que yo rezo”….
Los cuatro hombres
observaban la escena y murmuraban: “Que cuquita tan rica, merece que le echemos
otro polvito”… Ella argumenta: ¡Claro, cuando en sus vidas estos malandros iban a tener relación con una señora, tan perfumada y elegante cómo Yo!... Y luego llegó un momento, que se olvidó, de todo pudor y recelo, cerró los ojos y se
entregó una y otra vez, pasando de uno a uno hasta sus cinco subyugadores…
Después de un tiempo una
de sus amigas, que sabía de lo sucedido, le sugirió un psicólogo, para superar el trauma...El especialista
le sugiere que empiece por golpear fuertemente a un gran cojín que había en el
consultorio, para descargar su enorme ira, pensando que cada golpe iba dirigido
a los violadores, y por ese tratamiento, salía de ahí con la misma rabia y con la cartera desplumada… Entonces, ella pensó en mirar el asunto desde otra perspectiva: Dejarse llevar por los sentimientos que la hacían recordar toda esa experiencia con grata morbosidad, le harían menos daño que dejar su dinero al psicólogo... Reviviría esos momentos, de lo que, por primera vez
en su vida disfrutó verdaderamente, ser poseída de esa manera tan inusual, pero tan placentera, donde hasta sus raptores se sintieron, enamorados de ella, era mejor dejar de
lado los remordimientos y el rencor en otro lado, ya que, no estuvo completamente consciente, por los efectos de drogas, alcohol, descontrol mental, rezos, etc.
Y decide asumir esos momentos, como un hechizo mágico, donde ella fue la heroína y protagonista de un episodio, de pasión, lujuria, y aventura, ocasionados, gracias a sus encantos...
Y para finalizar, la señora Teresa piensa en Voz alta:" No lamento, ni un poquito la violación, tanto, como la perdida de mi automóvil... porque con la situación de ahora, imposible volver a comprarme otro...
Este es un relato de la vida real...Tal como me lo contaron.
Y decide asumir esos momentos, como un hechizo mágico, donde ella fue la heroína y protagonista de un episodio, de pasión, lujuria, y aventura, ocasionados, gracias a sus encantos...
Y para finalizar, la señora Teresa piensa en Voz alta:" No lamento, ni un poquito la violación, tanto, como la perdida de mi automóvil... porque con la situación de ahora, imposible volver a comprarme otro...
Este es un relato de la vida real...Tal como me lo contaron.
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