La voz de la poesía, llega a mí como un susurro.
Ella no tiene horas de llegada, aunque prefiere
las de la madrugada.
Llega suave y poco a poco se
apodera de mí, agudizando mi memoria
para oír y captar las palabras y para retenerlas ahí.
Azarosa me levanto medio dormida, para que no
se borre todo lo que sentí.
A veces son mensajes que tengo que descifrar,
con el privilegio de mi corazón.
Como una madrugada, que claramente me
llegó una voz como un susurro que me dijo:
“Encuentro Conmigo”.
Fue un regalo para mí esas palabras, y ellas llegaron
para marcar mi natural destino, de mirar y comunicarme
con el mundo de una manera diferente.
Ahora las espero en el resplandor del día, o en la noche
cuando contemplo alguna estrella.
abriendo mi corazón a ese sentimiento, que ejerce
esa bella influencia de hacerme comprender,
lo que antes no notaba."
Luna
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