domingo, 30 de noviembre de 2014

Metamorfosis de Amor...

Me gustaba frecuentar un paraje hermoso que había descubierto en mis paseos por el bosque, había una cascada que se deslizaba y formaba con la espuma  blanca un  espejo de agua, donde permanecía largo tiempo contemplando la figura que parecía vivir dentro del agua. No se si soñaba, pero surgían  imágenes  que desfilaban ante mí, sentía volar mi alma que ya pertenecía a ese lugar...Y así en esa contemplación, me encontraba,cuando noté que había alguien observándome fijamente desde hacía algún tiempo... El ruido de una rama al caer desde un árbol cercano, hace que desvíe mi atención y me encuentre con  un pájaro negro, de brillante plumaje y ojos penetrantes que me observaban con un interés especial. Sentí una gran ternura en su mirada, y de inmediato, irremediablemente quedé hechizada ante él...

No estaba dispuesta a dejarlo ir, y me acerqué despacio, toqué una de sus alas con suavidad para no espantarlo y con ternura le sonreí,  él me devolvió su sonrisa profunda y misteriosa y me  hizo  un gesto para volar con él. En un instante subí a sus enormes alas sin ningún temor, emprendiendo un vuelo en la espesa vegetación y a medida que alcanzábamos altura, me maravillaba de contemplar desde lo alto el hermoso paisaje que se extendía y que cada vez se hacía mas pequeño, sintiendo una maravillosa sensación de libertad.

Sentí una transformación en mi cuerpo, ahora soy un ave  igual  que él, y en ese momento por primera vez experimenté una sensación de plenitud de éxtasis total que me ha acompañado en todos los instantes que he permanecido a su lado. Mis deseos recónditos se hicieron realidad, la soledad quedó en el bosque surcada y rota, como un fragmento de mi otra vida.

Seguimos volando juntos cada vez, hasta llegar a horizontes remotos, hemos cruzado el mar, hemos encontrado otros bosques y en muchas ocasiones hemos hecho nidos de amor a la medida de nuestros deseos, en absoluta libertad, sin empañar nuestra armonía.

El amor surgió en un bosque, en una cascada que formaba un espejo de agua y reflejaba una imagen, con unos sueños, que querían guardarse en aquel recinto de soledad. Pero  en un mágico instante, nuestras almas se encontraron y transformaron, hasta encontrar horizontes de oro en compañía del amor.


¡Eres mi pájaro negro, pintado y labrado en mi corazón!


jueves, 27 de noviembre de 2014

Elevación

Hoy me  he alejado de la realidad del mundo, y acurrucada en un rinconcito del Ávila, en un pequeño montículo donde suelo ir siempre que quiero abstraerme en mis pensamientos, a contemplar la naturaleza,  y ha encontrar  ese pequeño respiro que me hace imaginar mis momentos mas íntimos  y quizá los que marcaron mi vida durante mi niñez...mi época dorada, parecida a todas las de los niños que viven en el campo y que tienen el privilegio de contar con la abundancia de lo silvestre para acompañar sus juegos.
Empiezo a descortinar el tiempo, hasta permitirme llegar a la lejana niñez, donde sólo habitaban la inocencia, unida a la curiosidad como mis eternas compañeras...
En esos momentos de la existencia mía, donde mis pensamientos, no buscaban excusas, obsesiones, ni razones...Aquí en mi mundo bonito, donde la presencia de mi madre y mi abuela bastaban para sentir la seguridad y el amor que necesitaba. 
Era  dulce la presencia  de mi abuela, llenaba todo mi entorno, la veía  trajinar en sus quehaceres cotidianos y en su manera de proporcionarme todo lo que necesitaba ...La evoco en este instante, con claro sentir,  siento la belleza de la naturaleza que se extendía cómo una sábana pintada de colores, la que me brindaba todo para sentirme a gusto y feliz con mi alma de niña y nutrida de tanta belleza.
Por un instante me quedo ensimismada y surgen de inmediato imágenes, voces, pasos, olores, sabores, que me son tan familiares...Observo una figurita de pasitos rápidos, con largas trenzas, tímida pero segura y feliz. En este instante corre para atrapar a una mariposa y su voz es tenue, su expresión dulce...La reconozco. ¡Soy Yo!.
Poco a poco van apareciendo ante mi  muchas personas queridas, se detienen, sonríen y me abrazan con cariño. Luego en este recorrido de mi mente por mis recuerdos, aparece  otro paisaje, el de un cementerio donde resalta una tumba gris debajo de un gran árbol, llevo flores y las coloco y siento una gran ternura por ese lugar. Ahí reposa mi abuelo, recuerdo la historia de amor que me relataba mi abuela en cada ocasión que íbamos a el lugar...Solía decirme siempre: "Aquí quiero descansar a su lado"...Mucho tiempo después se hizo realidad su deseo, yo misma lo cumplí...Espero que sus almas estén juntas donde quiera que se encuentren, si es posible la finalidad de la inmortalidad.
Ahora recorro con mi vista, todos los parajes de este sitio exuberante de belleza natural, Siempre pensé que era un regalo que la madre naturaleza dio a esa parte del mundo, donde el río de aguas transparente, los cafetales con sus flores regando sus perfumes por doquier, la sencilla casita repleta de flores, amor y calor, donde todas esas maravillas nos hace personas muy particulares, con un profundo amor y admiración a todos los paisajes que nos rodean...En este instante todas estas visiones pasan por mi mente y hacen que mi espíritu se eleve  hasta esos horizontes de oro. Me embarga un sentimiento de amor profundo, que hace que mi mente se mantenga conectada a la contemplación del lugar maravilloso donde nací, donde me sentí feliz y donde  formaba parte en ese espacio armónico que quedó retratado en mi alma.
Paso mucho rato en esa comunicación entre mi alma y los recuerdos, hasta que poco a poco  todo empieza a alejarse de mi...Hago un último esfuerzo por mantener mi mente en contacto con estas visiones, pero todo  se va alejando de una manera imprecisa, como si una nube gris se llevara mis recuerdos, me despido triste de  lo que conformaba esta alegoría de belleza que por unos instantes me envolvió...
¡Adios abuelitos!
¡Adios Cementerio!
¡Adios tíos de la casita hermosa!
¡Adios días maravillosos de mi infancia!
De nuevo a la realidad, me doy cuenta que son sólo recuerdos que han estado jugando con mi mente...emprendo el regreso por el empinado camino del Ávila, contenta de tener el privilegio de reunirme con la fantasía a abrir esa ventana hacia los lugares donde quisiera permanecer... 



jueves, 13 de noviembre de 2014

Te quiero...

Te quiero...porque entraste en mi vida y aún sigues ahí...
 Te quiero día a día porque me haces sonreír con solo pensar en ti.
Te quiero por cada cosa que me dices, o cada mirada que me diriges,
me enamoro más de ti.
Te quiero porque es imposible no hacerlo, y porque tu sombra
persigue mi pensamiento donde quiero que yo  voy...
Te quiero por todas esas cosas que nos unen y las que nos diferencian también.
Te quiero porque tu presencia me fascina, por cada sonrisa que me das
y cada beso que me regalas. 
Te quiero porque con tan sólo imaginar tu silueta, mis latidos se disparan... 
Te quiero porque a tu lado el tiempo pasa muy  rápido y nunca es suficiente,
para llenarme de ti...
Te quiero por ser tan especial y por hacerme sentir especial a mí. 
Te quiero porque haces que mi vida sea más fácil y todos mis problemas
se serenen con el agradable sonido de tu voz...
Te quiero por haberme cambiado como persona.
Te quiero porque aparte de ser la persona más maravillosa que podría conocer,
eres mi mejor amigo, y sé que voy a poder contar contigo siempre que lo necesite..
Te quiero porque gracias a ti, hoy me siento realizada....
Te quiero por que me nace quererte...