Te extraño tanto... tanto, que el día se pasa volando, y yo sumergida en una nube de nostalgia que se dibuja en las paredes, en la ventana, en la sabana con la que me arropo. Me quiero ir tras de ti...
La sonrisa se me pierde muchas veces en la melancolía y, yo te sigo pensando, sin cansancio, sin apuro, deleitándome y sumergiéndome en ti, en esos instantes sólo me quedo contigo.
Mis sentidos esperan aletargados, esperando verte llegar.
Y es tan dulce la espera, que me pierdo en ella, como en esas mil y una noches que te pienso y que me llevan a buscar
la luna eterna y mágica para compartir con ella mi nostalgia y consolarme de tu ausencia...pero a veces hasta a ella la siento misteriosa, lejana y fría y... entonces me quedo de nuevo contigo, pensándote sumergida en tu recuerdo…
