He pasado mucho tiempo acomodando las cosas como yo las imagino,
dándole ese matiz que a mi me gusta…pero al encontrarme de cara a la realidad,
no suelen ocurrir como deseo y me cuesta asimilarlas…
Cuantas veces he torcido mi existencia, inmiscuyéndome en lo que no podía ser,
pareciera que sólo puedo ser dueña absoluta del milagro de la vida, al detenerme
a sentir las partículas sensibles de la naturaleza, al estar en contacto con ellos...
Las mariposas no me temen se acercan, se posan cerca de donde me encuentro para querer decirme algo…
Una exótica flor me saluda con su brillo y me detengo a admirarla.
Un avecilla me regala su melodía y el aire susurra para darle a todo armonía...
Muchas hojas de colores forman una rara alfombra, para que yo camine.
...El mundo es mío, cuando yo lo busco de esta forma.
Pero al tratar de prolongar instantes en tu compañía, con esa risa que nos ha unido tantas veces...Es como cerrar una página del cuento anterior y abrir un capitulo diferente, donde nos volvemos invisibles para las infinitas posibilidades del amor que nos brindamos, y al entrar en él, vislumbro de inmediato esfumarse lo que yo espero cuando el mundo es sólo mío…
Luna en agosto 2011